La historia de las porcelanas Capodimonte se remonta al siglo XVIII en Italia, cuando el rey Carlos VII de Nápoles fundó la Real Fábrica de Porcelana en 1743, en la localidad de Capodimonte, de donde proviene su nombre. Muchas de las piezas están inspiradas en escenas mitológicas, obras literarias, momentos y personajes cotidianos que marcaron épocas. Las porcelanas Capodimonte son de gran popularidad en toda Europa, muy apreciadas por la nobleza y la alta sociedad. Aunque la fábrica original cerró en el siglo XIX, el estilo y la artesanía de las porcelanas Capodimonte siguen siendo producidas en la región, siendo admirados y buscados por coleccionistas de todo el mundo.

**Sello**: Muchas piezas auténticas de Capodimonte llevan un sello distintivo, a menudo una corona sobre una «N» (que representa a Nápoles), que certifica su autenticidad.

Esta porcelana representa una escena romántica y de aventura, con un mosquetero elegantemente vestido montado en un caballo, acompañado de una princesa o bella dama. El mosquetero podría estar protegiendo a la princesa, lo que añadiría un elemento de intriga y caballerosidad a la escena. La porcelana probablemente estaría ricamente decorada con detalles intrincados, como bordados en los trajes, expresiones faciales detalladas y gestos elegantes. Los colores vibrantes y la composición están diseñadas para capturar la atención y la imaginación del espectador.